Una gran leyenda de corredores es la historia de Tom Longboat, un corredor de larga distancia canadiense que se convirtió en una sensación a principios del siglo XX.
Longboat, de ascendencia indígena, nació en una reserva cerca de Brantford, Ontario, en 1887. Desde joven, se destacó en el running y comenzó a competir en carreras locales. En 1907, ganó su primera gran carrera, la carrera de maratón de Boston.
El triunfo de Longboat en Boston fue una sorpresa para muchos, ya que se enfrentó a algunos de los mejores corredores del mundo en una época en la que los atletas indígenas rara vez eran reconocidos. Sin embargo, Longboat demostró ser un competidor formidable y ganó la carrera con un tiempo récord.
Después de su victoria en Boston, Longboat se convirtió en un héroe nacional en Canadá y comenzó a competir en carreras de todo el mundo. En 1909, estableció un nuevo récord mundial en la carrera de media maratón de Hamilton, Ontario, y en 1912, representó a Canadá en los Juegos Olímpicos de Estocolmo.
A pesar de su éxito, Longboat enfrentó muchos obstáculos en su carrera. En particular, luchó contra la discriminación racial y la falta de apoyo financiero. En 1916, después de retirarse del running competitivo, Longboat se unió al ejército canadiense y luchó en la Primera Guerra Mundial.
A pesar de los desafíos que enfrentó, la carrera de Tom Longboat se ha convertido en una leyenda en el mundo del running. Su éxito como corredor indígena ha sido una fuente de inspiración para muchos, y su legado ha sido reconocido a través de numerosos premios y homenajes en Canadá y más allá.
En resumen, la historia de Tom Longboat es una leyenda en el mundo del running que ha inspirado a generaciones de corredores. Su éxito como atleta indígena es un testimonio de la perseverancia y el compromiso con la excelencia, y su legado sigue vivo hoy en día.
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